César - 18/5/2008

Pues bien. Creo que debo ser el segundo en atacar este blog y flechar, en esta diana virtual, el tercer mensaje. Por alusiones también, soy el tipo sin móvil y sin tantas otras cosas, sin carisma, sin tierra, sin ninguna de esas gracias que concede Dios gratuitamente, y eso sí, con un par de cosas valiosas que no les digo para que no me las roben.

Es curioso, me planteo entrar ahora en liza después de dejarle cancha a Luis, que va a ser el responsable de lo que vaya saliendo por aquí, como miembro más antiguo de la alianza, aka sello discográfico, y me doy cuenta de lo mucho que debemos a los bares en nuestra andadura. En una terraza de Sant Andreu, una tarde de septiembre de 2004, entre el sol y los primeros vientos, hablamos Jose y yo de la emoción que supondría tener en las manos canciones regadas por nosotros; en Boadas –mi manía por construir sobre mitos- intentamos definir los primeros pasos, en otra terraza simétrica de Mandri se deslizo como pica en la nueva etapa la pregunta de Luis, “Pero, ¿por qué tienes tanto interés en conservarla?” Digamos que el otro día el deporte vino a responderle.

Así que, dejemos tiempos pasados y, como dijo el poeta “vengamos a lo de ayer”. Y lo que pasó ayer es que hemos salido de la casa, la hemos ventilado, ha habido reformas y hemos preparado habitaciones para los nueve que somos ahora. La cortesía obliga a que los más viejos hagamos de anfitriones, y los demás, pues algunos se presentarán posteando, otros no saldrán de su habitación, alguno está perdido irremediablemente,… ¿Quien sabe lo que pasará a partir de ahora? Nosotros hemos ofrecido casa y la abrimos. Bienvenidos todos, que mientras dure, la puerta estará abierta.

¿Qué encontraremos en las conversaciones de jardín?, que es lo que intenta remedar este blog. Pues el propósito es lo que nos apetezca. Quizás el hilo temático deba ser “la vida diaria de un sello discográfico”. No creo que haya otro blog igual en el mundo, están demasiado preocupados nuestros colegas en ganar dinero o en salvar los barcos del naufragio. Y sobre este propósito colgaremos lo que nos va asombrando cada día: una película que hemos ido a ver y nos desvela una banda sonora intensa –bueno, con los gustos cinematográficos de los integrantes esto va a ser difícil-, una página web que adoramos, la certeza de que llega el otoño, nuestro locutor favorito, algún concierto, libros. ¿Cómo se vive dentro de un sello discográfico?, en definitiva. Ya veréis qué glamour.

Y sobre todo, defenderemos aquí a capa y espada los formatos musicales alejados de la funesta manía de acumular canciones apretadas en un cdr que luego –seamos serios y reconozcámoslo- nunca se escuchan. Ya nos gustaría que esta defensa recayera en el vinilo, pero –virgencita, que me quede como estoy- nos vale cualquier formato musical. Cualquiera que suponga un tiempo de viaje, compra, elección, ansia. Porque a los individuos que únicamente se bajan canciones y que no toman Internet como lo que es, la revista musical definitiva, no les gusta la música. Les gustarán otras cosas, todo lo que rodea a la música, la vida social que se organiza alrededor de la música, una chiquilla o un señor a los que les apasiona la música. Les gustará todo esto, pero no la música. Siempre han estado ahí, intentaban disimular frente a los que realmente nos sentíamos comidos por ella y ahora lo tienen más fácil. Perderse la compra de un disco, pensar en él, llevarlo cerca en el autobús al volver a casa, ir abandonando al cerrar la puerta mochilas, bolsas y hasta ropa para disfrutarlo casi vírgenes es como perderse la parte más rica del sexo después del orgasmo: el deseo.

Bien, pasen y disfruten. No se necesita un blog más, estoy de acuerdo. De hecho sobran nueve de cada diez, pero si alcanzan a llegar aquí vía San Google, pues espero que se entretengan un poco.

4 comentarios:

Pedro dijo...

Música y bares.

Ánimo y adelante, Paseos.

Discos de Paseo dijo...

Pues muchas gracias don Pedro. Sus palabras y las de sus amigotes nos sirven siempre siempre de apoyo y de respiro. Más de lo que usted se cree.

César

Juan dijo...

Bienvenido equipo de “discos de paseo”,
Soy un visitante que por casualidad se metió en esta página Web.
Antes de marcharme quiero aprovechar para desearles lo mejor con este grupo.
He escuchado sus canciones gracias al apartado de audio y me parecen muy bonitas.
También he leído los diferentes comentarios posteados en este blog y me parecen buenas personas con motivación por su trabajo.
Quizás este grupo no sea el mas conocido pero lo importante es que ustedes se lo pasen bien haciendo lo que hacen y creo que así es.
En especial, quería saludar al usuario Cesar, que refleja ser buena persona, peculiar y muy culta por su forma de expresarse.
Ánimos con el grupo y suerte!

Juan.

Discos de Paseo dijo...

No, si al final va a resultar que soy yo el que tiene carisma... :0)))